28/10/10

LAS PRIMERAS ESCUELAS DE LA COMUNA

En el centro de la comuna, a una cuadra de la plaza, en la calle José Francisco Vergara, se levantaba la Escuela Pública Nº 165. Era una contrucción de adobes, de un descolorido color blanco a la que se accedía por una puerta central casi pegada a la calle. Atendía seis cursos, con una matrícula aproximada de ciento cincuenta alumnos.
La vieja casona había sido construída en el año 1914 y ya algunas generaciones de alumnos habían sido atendidos allí.
Esta era la "Escuela del pueblo" a cuya entrada había un enorme naranjo y en el fondo hacia el poniente unas matas de higuera.
Escuela Nº 165, en la calle Vergara en la década del 50
Son estos detalles los que recordarán quienes pasaron un día por allí, además de la gran poza de agua en el patio durante los días del invierno.

El otro establecimiento era la la Escuela Nº 32, del barrio "la estación", que recibía a los niños de ese sector.
La mayoría de los estudiantes eran hijos de campesinos, artesanos o pequeños comerciantes.
El sector estación era nominado de este modo por la cercanía a la estación del ferrocarril...La escuela era una antigua casona de principios de siglo que tenía como especial característica el pequeño canal y el cañon a la entrada del recinto.
Frontis de la Escuela 32, la estación
En el barrio de la estación se instalaron antiguas familias que convivían con el paso de los trenes, que con frecuencia de una o dos horas alteraban el silencio del sector.


Recién, al término de la década del año sesenta, debido a la expansión territorial, surgió un tercer establecimiento educacional en un nuevo sector denominado "Población María Ruiz Tagle de Frei"
La nueva Escuela para la enseñanza básica se creó con el número 386, y debía cobijar a los alumnos de dos nuevos sectores : la población "Ruiz Tagle" y una "toma", llamada "el sauce".
Los vecinos estaban orgullosos de la Escuela que se edificó junto a la plaza , en el corazón de la población.
Era un hermoso plantel de finas terminaciones, rodeado de árboles y jardínes.
Desde los inicios, los apoderados de allí, fueron muy participativos.
Generalmente, en gran cantidad, asistían a las celebraciones y actos conmemorativos. La convivencia se  daba de una manera muy fluida y los encuentros se hicieron muy familiares.
Esta es la página de un diario de vida de Toña, alumna del cuarto B de la Esacuela 386.
Ella relata las emociones durante la celebración del aniversario de su escuela. Sin duda experiencias similares vivían los niños de entonces en los otros colegios de la comuna.

EL ANIVERSARIO DE LA ESCUELA


   Martes 03 de mayo de 1979
"Querido diario:

Hoy ha sido un día muy lindo, en realidad de esto veníamos hablendo hace bastantes días, la profesora nos dijo que el colegio estaba de cumpleaños.
Ahora estoy muy cansada, fue un día lleno de sorpresas.
La escuela estaba de aniversario, estamos cumpliendo 10 años y todo fue muy bonito.
Mi mamá junto con otras señoras, estuvieron el sábado pintando las salas, limpiaron los vidrios, pintaron los muebles y pusieron cortinas amarillas. Nuestra sala quedó impecable. La más bonita de todas.
Bueno, ayer en la mañana estuvimos preparando una presentación que haríamos hoy, a  mi me correspondía ser la  bailarina. Fue hermoso lo de hoy.
El patio estaba lleno de guirnaldas, todos los cursos estaban en el patio junto con las mamás y los profesores, estaba todo ordenado.
En la mañana hacía mucho frío, pero todos nosotros cantábamos y gritabámos. Mi mamá me había hecho un lindo peinado y me compraron un traje blanco como de novia.
Estábamos muy nerviosos esperando la hora de actuar.
El profesor anunció la participación del cuarto B, empezó la música y nos salió todo perfecto. Todos aplaudían. En la sala la profesora nos felicitó y todos grtábamos y nos abrazábamos.
En la tarde había que volver, todos tenían que venir porque se iba a realizar una ceremonia muy importante.
En el patio, la profesora nos formó y con mucha atención participamos de la celebración. No fue tan aburrido.
Lo que dijo la Directora, la Señora Carmen,  fue muy bonito; ella habló de lo bien que se portaban los alumnos, de lo creativos que eran los profesores, del gran reconocimiento para los papás y las mamás que colaboraron en las actividades escolares.
Cuando nombraron a la Señorita Berta, todos gritamos y aplaudimos, era divertido porque ella nos hacía callar. Los profesores y la Directora se sacaron una foto en el medio del patio y todos nos reíamos. Después tomamos chocolate con galletas y los niños del séptimo hicieron algo muy divertido.
Era ya de noche cuando llegamos a la casa y justo de puso a llover.
Estoy muy contenta con mi Escuela, me encantó todo. ahora tengo mucho sueño, mañana te cuento más....
Toña "

LOS ANTIGUOS DIRIGENTES

El pueblo de Quilicura tenía una calle central que terminaba en la esquina de la plaza.
Allí se encontraba el centro cívico que componía el edificio municipal, el retén de carabineros, un consultorio,el viejo salón del cine "México" y la plaza de la comuna.
La calle central, José Francisco Vergara, eran unas cuatro o cinco cuadras que albergaba el comercio de aquellos años: verdulerías,talleres de calzado,cantinas, carnicerías y pequeños almacenes.
En el centro mismo había una diminuta farmacia y junto a la farmacia el almacén de la Señora Leonor, la madre de Valentín.
Hubo un contexto en la despedida de Valentín Farías Liberona, connotado comerciante, dirgente deportivo, jugador de fútbol y encargado de las ramas infantiles deportivas de la comuna.
Durante los años de su existencia, la conducta de los socios y simpatizantes de los clubes deportivos, estaba absolutamente regulada por los líderes y Dirigentes.
A pesar de la gran efervecencia  y la pasión que provocaba el deporte, la amistad de los vecinos era inalterable, algo que no se podría comprender por estos días, donde la inusitada violencia es incontrolable y la vida se convierte en una venganza permanente.
No fue así durante esta época. Una vez concluida la confrontación, gracias a la intervención de los dirigentes, todo tornaba a la calma. La palabra del líder no tenía apelación
Esto permitía que la quietud de aquellos días, fuera siempre perdurable.
Los dirigentes eran los simpatizantes más apasionados de los equipos de fútbol, pero eran , al mismo tiempo, los más responsables de las conductas de los seguidores.
Valentín Farías era uno de estos dirigentes...
Dirigentes en el antiguo restaurant
de la Familia Vasquez

Gente del fútbol, antiguos quilicuranos, familiares y amigos le velaron entre cánticos y oraciones.
Aquella tarde calurosa de febrero, el templo como es de suponer ,estaba repleto. Era el día de sus exequias.
Estas son la palabras que fueron leídas en su despedida.

27/10/10

VALENTÍN

                                Club Biblioteca, una de las formaciones del primer equipo 1965
La década de los años sesenta, trajo consigo toda una transformación del mundo. Época de grandes cambios sociales y culturales, todo un florecer del pensamiento. La música de los jóvenes de impuso, lo mismo que las nuevas formas de la vida familiar, una revolución de todo lo establecido, donde todos nosotros, los niños y jóvenes de ayer fuimos protagonistas.
Quilicura a fines de los años cincuenta, al inicio de esta nueva época, tenía una identidad geográfica y la calle José Francisco Vergara, correspondía al sector "pueblo".
Había otros sectores también:
La Estación, Las Parcelas, San Luis, Lo Zañartu.
También acá en este rincón del planeta, en este pequeño pueblo se hicieron sentir los ecos que estaban cambiando el mundo.
Valentín había nacido el 04 de febrero del año 1941, era el último, el menor de los 11 hermanos del matrimonio de Rosendo Farías y Leonor Liberona y le correspondió , al igual que muchos de nosotros, vivir la adolescencia y la juventud en esta nostálgica y hermosa época de los años sesenta.
Siendo niño, perdió a su padre, por lo que tuvo que acompañar a su madre viuda, quen falleció cuando el cumplía recién los 18 años.
Su carácter apacible , sensible y taciturno se forjó con estos acontecimientos y debió enfrentar la vida en esta soledad.
Sin embargo nunca estuvo solo. Su pequeño almacén en la esquina de la vieja botica, al salir por la calle Loa carreras, más que un boliche o fuente de soda, era el obligado sitio de encuentro de todos sus amigos. Era normal que a media tarde o durante las primeras horas de la noche, nos reuniéramos allí los niños y jóvenes de ayer.
Sin la tv, nuestra mayor entretención era la charla del fútbol en pequeños grupos de siete u ocho personas.El almacén de valentín era algo así como una sede social.
El club deportivo "Biblioteca",había sido fundado en el año 1931, fue la gran institución que cobijó a los jóvenes del sector "pueblo". Hablamos de otra forma de vida, otros valores, otra juventud , otros anhelos, donde la secretaría del club era la pequeña fuente se soda de Valentín.
Y en este club, él lo hizo todo : utilero, Presidente, secretario, tesorero, delegado, socio, jugador formador de niños, porque nadie como él , hizo suyos los versos del himno de aquel club deportivo : "biblioteca, ejemplo de valor...".
El mundo cambiaba, pero los jóvenes de Quilicura, tenían como pasión el fútbol y los campeonatos que año a año, repletaban nuestro pequeño estadio.
Valentín formaba parte del del primer equipo del club, al anochecer de los domingos y durante la semana los comentarios eran en gran parte, sobre las atajadas que había hecho "el lancha" ( que era su apodo) en el último partido. Así transcurría la vida en nuestro pueblo tranquilo y hospitalario.
El día 21 de diciembre, en los difíciles días del año 1973, bajo el terror del estado de sitio que había instaurado el regimen militar, Valentín contrajo matrimonio con mi hermana Carmen. Fruto de este amor nacen sus dos hijos , Víctor y Eduardo.
Durante esta etapa de su vida, trabaja como auxiliar de servicios en el Liceo Gabriela Mistral, allí construye grandes amistades con profesores, apoderados y alumnos, que le recordarán por su sencillez, su afabilidad y su espiritu solidario y respetuoso.
En general valentín era un personaje muy "cachurero", podía guardar hasta una tuerca, cualquiera que encontrara, porque según él decía : "algún día servirá".
Precisamente, en este andar, se especializó en la colocación de vidrios, oficio que le permitió conocer este nuevo Quilicura que emerge en la década de los noventa.
Todos somos testigos de su arduo trabajo, de su gran esfuerzo para equilibrar en su fiel bicicleta enormes vidrios, con los que recorría las calles de la comuna. De este modo, Don Valentín, se hizo querer de las nuevas generaciones de quilicuranos.
Una grave enfermedad en el año 2005, altera drásticamente su vida normal. No se recuperará de esto y es así como poco más de un mes, soportaba otra gran afección en una sala del hospital.
Ayer domigo, pasadas las seis de la madrugada, a los sesenta y seis años, se durmió y ya no despertó.
Una grave enfermedad en el año 2005, altera drásticamente su vida normal. No se recuperará de esto y es así como poco más de un mes, soportaba otra gran afección en una sala del hospital.
La vida le pasó la cuenta y lo transformó en un niño, con toda la inocencia de un niño, precisamente porque la puerta del cielo es pequeña y sólo entran allí, los que retornan a ser niños.
Querido valentín, tu pertenecías a todos nosotros.
Eres parte de nuestra historia, de nuestra pequeña historia.
Por eso, los niños de hoy hablarán de tí a otras generaciones y yo me encargaré que esas gentes no te olviden .
Nosotros nos quedaremos acá con la imagen de tu alargada figura y con el sonido de tu voz frágil.
Que la luz salga a tu encuentro y que te reciban los ángeles...

                                

26/10/10

LOS VECINOS SE ACERCAN.

En principio los asuntos sociales, corporativos de la comuna, nunca le interesaron mucho a los sencillos habitantes de nuestra comunidad.
Era suficiente con participar en las elecciones y más o menos identificar al Alcalde y algunos "Regidores".
Pero al transcurrir los años, motivados por las organizaciones comunitarias, los vecinos de fueron interesando un poco más en la historia, en conocer , al menos el origen de este apartado pueblo.
Sin embargo este interés en el caminar histórico de la comuna se tradujo más bien en la asistencia a encuentos y ceremonias.
Ya en el nuevo milenio, la comunidad quilicurana, tenía conocimientos sobre aspectos históricos.
Con alguna frecuencia los dirigentes y representantes sociales acudían a participar de instancias culturales.
Este es el saludo efectuado a cientos de quilicuranos que se congregaron para participar en una emotiva ceremonia de aniversario...

DIEZ DE AGOSTO: EL ANIVERSARIO

  ¡ Qué hermosa nuestra comuna..!
Al contemplar el mes de agosto, no puede haber otro comentario.
Esto es muy significativo.
Es el mes de aniversario.
Es la fecha central de nuestra breve historia.
El día 10 de agosto, unos vecinos visionarios crearon la comuna de Quilicura. Esto fue en 1901.
Desde entonces, tres generaciones de quilicuranos, han dado vida a este lugar, tres generaciones de Quilicuranos han impregnado un sello sobre nosotros para transformar nuestra historia en lo que hoy somos.
Nuestros padres y abuelos construyeron una forma de ser que aún perdura.
Somos la historia de ayer.
Pero hoy somos el progreso, la modernidad.
Es este mes de agosto, el que acrecienta nuestra identidad, nos permite reconocernos, nos conecta siempre con la historia y nos da el impulso para seguir construyendo sueños.
Un gran saludo, un abrazo, un sentimiento muy sincero e íntimo para todas y cada una de nuestras familias.
Para cada quilicurano que se ha mantenido en este suelo...

LAS CAMPANADAS DE LA FE

La comuna tenía tres vertientes definidas de participación vecinal, años cincuenta y sesenta, eran estas tres entidades las que congregaban a los Quilicuranos en situaciones muy específicas.
Por una parte estaba el fútbol, con todo el desborde de niños y jóvenes, especialmente los fines de semana.
Como había varios campos deportivos durante la mañana jugaban fútbol los niños o "infantiles" y por la tarde los equipos adultos.
La iglesia Evangélica, era un sonido inconfundible en las tardes de los días domingos.
Una larga y ordenada fila de instrumentistas y cantores elevaban  himnos y cánticos a Dios y desde lejos se podía escuchar el eco de las voces, de las guitarras , del acordeón y las trompetas.

Por otra parte, la presencia de la iglesia Católica.
En la esquina de las calles Matta y  O'higgins, se alzaba la capilla se adobes, la única que tenía el pueblo.
En el mes de noviembre se rezaba "el mes de María" y muchos feligreses acudían al pequeño templo, la mayoría eran mujeres de avanzada edad y muy devotas, asiduas del misa y del rezo del rosario.

Al presente, es posible que las campanadas de la iglesia no se escuchen, pero en el año 1954, si que se escuchaban.
El silencio del campo y de nuestro entorno, nos permitía escuchar las campanadas de la Iglesia que llamaban a la misa del día domingo, a la misa de la siete en los días de la semana o el trepicar en la despedida de un difunto.
Las campanadas de la Iglesia resonaban en el pueblo y los católicos acudían a su llamada.

La señora Dalila Galleguillos era una de las vecinas más antiguas y vivía en la calle Guardia Marina Riquelme, sector central de la comuna, reconocida y activa integrante de la Iglesia católica de Quilicura quien acudía diariamente a la parroquia.
Contrajo matrimonio con Fernando Contreras, con quien tuvo cuatro hijos.
Ella falleció en septiembre del año 2006 y fue acompañada por muchos feligreses.
Las campanadas de ese día no se dejaron escuchar. Un ambiente de jolgorio, de cuecas y tonadas anunciaba las festividades de la independencia.
Este poema fue leído en su funeral , luego de la Eucaristía que se celebró a media tarde en el bullicio del mes de septiembre...

DALILA : PÉTALOS DEL ROSARIO

Ha venido la primavera sobre nuestro suelo.
Allá en tu casa pobre y pequeña,
estarán revoloteando pajarillos y mariposas.
Como siempre ocurre en los días de septiembre
el aroma de las flores, las acacias y los aromos
inunda cada rincón de nuestro pueblo.

El perfume de la primavera viene desde el sur,
atravesando nuestros cerros y posándose sobre tu esquina:
es la añosa casa de adobes,
la del enrejado maltrecho
la de la puerta de madera
la misma donde el tiempo se detuvo
y no quiso deshacerse de los viejos álamos.

Entonces vuelvo a mi infancia
para recorrer tu patio y entrometerme
en la intimidad de tu hogar, donde éramos felices:
tu visitando cada una de las plantas floridas,
abriendo surcos para que el agua hiciera el milagro
de bendecir las uvas, de bendecir la hierba
de bendecir los árboles frutales.
( y nosotros en nuestros juegos de niños,
entre risas y travesuras con la inocencia del campo,
incontaminados
divirtiéndonos
con las pequeñas cosas.)

¿ Recuerdas..?
Es el pan amasado que compartíamos a la media tarde,
es el tazón de té bajo el corredor
y tus reproches,
y tus palabras de ayer
para hablarme de tu pequeña familia
la que tenías en tu corazón,
como un tesoro.

Tal vez pensaste que olvidaría aquellos días de niño,
hojeando los viejos libros ilustrados
u olvidaría tu imagen zurciendo calcetines,
secando las frutas
entonando canciones idas y olvidadas.

Tal ves pensaste que tenía en el olvido
ese relato del ángel que irrumpe el sacrificio
de un padre de barbas blancas y
su pequeño niño tendido sobre la leña...

Ciertamente hoy la primavera llega y se ha posado sobre tí.
Estarás de blanco frente al coro de los ángeles
hermosa y radiante , como tu corazón generoso,
sin entender porque Dios te pone a su derecha
sin entender porque se ha tersado tu piel y
tus manos recobran la suavidad de antaño,
cuando acariciaste mi cabeza
y con dulzura de madre,
tejiste para mi un chaleco de negra lana.

Tal vez pensaste que olvidaría aquellos días de infancia,
corriendo por tus patios o
calentando mis manos húmedas en el brasero,
al centro de la vieja casa.

Tú eras parte del paisaje de mi pueblo que
deshoja lentamente, como mi padre,
en invierno,
las ramas del calendario.
Estoy seguro que eres uno de los pétalos
con el que se construye por los siglos de los siglos,
entre perfumes y rosas,
la estrecha puerta del cielo que hay para nosotros
allá en el paraíso eterno.
es la añosa casa de adobes,                                          Casa de la señora "Lila"
la del enrejado maltrecho
la de la puerta de madera


25/10/10

GENTE DE SERVICIO PÚBLICO

 Quilicura ha tenido un breve recorrido histórico y muchos servidores públicos, Alcaldes que fueron elegidos y que realizaron su mandato en diferentes períodos de la comuna.
Sus nombres están en las calles, en las villas, o en viejos archivos que el tiempo aún conserva.
Sus nombres son épocas históricas, aciertos , progreso y conflictos.
Familiares, amigos y descendientes fueron invitados a comapartir una instancia de homenaje y de reconocimiento a cada uno de estos nombres históricos, nombres que preservó la comuna en pequeñas láminas o placas de la historia, en calles ,pasajes o avenidas.
A la cita acudieron parientes, hijos, nietos, bisnietos y amigos de cada uno de ellos.
El centro cultural de Quilicura, lugar de encuentro y de participación se abría una pequeña galería en el segundo piso, con la historia cívica de nuestra comunidad, fue denominada como Salón de los alcaldes
Estas fueron las palabras de bienvenida y de saludo para cada uno de las familias que asistieron...

PARIENTES Y FAMILIARES DE LOS EX ALCALDES DE QUILICURA

Queridos amigos y vecinos:
Familiares y parientes de los nombres que estamos recordando.
Henos aquí contemplando y caminando por la historia de nuestro Quilicura. Para algunos será una historia larga, para otros será esta pequeña historia.
Quilicura inició su vida administrativa en agosto del año 1901, en esa fecha, fue creada en términos jurídicos lo que sería la comuna de Quilicura.
Pero sin duda ya existía esta región , ya tenía un nombre, tenía una identidad en los albores de nuestra historia, ya los antiguos habitantes le habían otorgado el nombre correcto gracias a lo que identificaba este lugar.
Y lo que identificaba este lugar era la fertilidad de la tierra y tres cerros que la protegían. Algo así como una fortaleza natural.
Podemos imaginar por un momento lo hermoso que sería nuestro paisaje: miles de aves al amanecer, cientos de flores silvstres e inmensos y centenarios árboles nativos. Una brisa suave de primavera que viene desde el sur.
Y allí se iniciaba nuestra historia, hasta entonces una historia colectiva y anónima, una sucesión de nombres, una sucesión de personas. Gente que cultiva la tierra y descubre en forma sorprendente que las uvas son deliciosas, que las sandías son enormes y que por todos lados surgen las higueras y los guindos. Porque la historia nuestra viene desde el campo.
Y nosotros en este presente podemos recorrer nuestra historia, nutrirnos de ella, aprender de ella y potenciarnos en ella.
Henos aquí, frente a la historia.
Y la historia cobra vida en los personajes, es como una novela colectiva donde unos personajes desconocidos o familiares transitan por ella.
La historia la hacen y la cosntruyen los hombres y las mujeres, los niños y los abuelos. Y Quilicura la han construido nombres y apellidos, familias y vecinos.
Por eso, esta tarde, nos reunimos a contemplar esta historia, porque Quilicura se ha ido construyendo con todos nosotros, con nuestros padres y abuelos, pero sobre todo con estos nombres.

Loa personajes que han escrito esta historia, tienen todos algo en común, han sido nuestras autoridades ayer, han trabajado en el servicio público, han sido servidores de la Comunidad, han sido elegidos por el pueblo, por la ciudadanía.
Esto es  lo hermoso de la democracia, y esto es lo particular de cada uno de nuestros nombres.
Se trata de personas a quienes la comunidad ha elegido para su servicio, el pueblo le ha dado un mandato y les ha pedido que sean su gobierno. El pueblo ha pedido a todos estos nombres que se hagan cargo de esta comuna.
Por eso, decía al inicio, que esta historia anónima deja de ser anónima cuando se descubren estos nombres, estos apellidos que cobran vigencia en una época particular de nuestra comuna y que representan las dificultades o los aciertos de esos momentos...
Cada uno de los Alcaldes de Quilicura ha sido muy importante en su tiempo, representa a una comunidad, a un pueblo, ha quedado su nombre como testimonio de esos días, porque precisamente ha liderado ese tiempo y el pueblo le ha otorgado una responsabilidad.
Por eso, nos detenemos esta noche y contemplamos esta historia y desde la distancia le rendimos un homenaje de reconocimiento, les agradecemos que hayan estado un día, unos años construyendo lo que hoy vemos y somos.
La señora Alcaldesa, junto con ustedes inaugurará este pequeño salón para que los estudiantes y los vecinos, todos los que visiten este lugar puedan entender que la historia se construye cada día y desde siempre. Que antes de nosotros hubo otros, que después de nosotros habrá también otros, pero que la vida es una sola.
Gracias a las familias, a los hijos, nietos y bisnietos, a los parientes cercanos y lejanos que se han dado cita en este Centro Cultural  y que han querido unirse a este momento, único e irrepetible, el encuentro de ayer y de hoy. Listado de Alcaldes
Juan José Legrano Romo
Federico Cooper
Pedro Pablo Ramírez
José María Cisternas
Victor Costa
Pedro José Escobar
Victor Barría
Paul Lacassie
Jorge Guzmán Palacios
Raimundo Romo
Alberto Portales
Gabriel Romo Romo
Francisco Romo Lira
Juan Larenas Trujillo
Jorge Salas Staak
Absalón Díaz Parra
Jorge Indo Beardesley
Jorge Moya Zuñiga
Elisa Alvarez Cáceres
Lucía Salas Romo
Ricardo Munizaga Salas
Ana María Ried Undurraga

21/10/10

LA TRISTE CEREMONIA DE GRADUACIÓN


En la Escuela Nº 337, un niño de doce años falleció mientras cursaba el séptimo año de educación básica. Su nombre era David Tapia Wistuba.
No es difícil imaginar la inmensa consternación de sus padres, el desconsuelo de su hermanita pequeña y la desolación de sus compañeros.
Una vida infantil truncada es de un desconsuelo para cada instante de cada día.
Sus compañeros de curso y su querida profesora lloraron su partida, su ausencia y su silencio.
Esta historia singular vivida en la intimidad de una Escuela, es universal.
Retrata sin duda, el drama, la conmoción y los sentimientos de todos los padres, pero, sin duda estas meditaciones pueden dar respuesta a las íntimas y desgarradoras interrogantes.
Los detalles acerca del deceso de David, tal vez no son necesarios, al menos para este libro.
Aunque es necesidad de todos el saber de que hablamos, forma parte del morbo que llevamos, porque los detalles de su muerte no aminorarán ningún sufrimiento.              
Por eso, estas palabras son y hablan de luz, nos envuelven en la eternidad y nos acercan a la divinidad, a los seres celestiales.
Mucho debemos aprender al respecto.
Es una respuesta envuelta en ternura, no por eso deja de ser verdadera.
Es la respuesta a los padres que han dicho adiós a sus hijos en plena infancia.
Es un consuelo divino.
David Tapia Wistuba inspiró estas reflexiones.
Este es el mensaje que fue leído por su profesora, durante la ceremonia de graduación de sus compañeros.
Al anunciar el nombre de David, nadie se levantó de su sitio para acudir a recibir la licencia, al  lugar donde tan solemenemente se realizaba la entrega.
Su profesora se acercó al micrófono, respiró profundamente y abrió su carpeta para leer.
Alumnos y apoderados permanecieron expectantes.
Instantes de incontenible emoción se vivían en el silencio sepulcral del patio del colegio, cuando la profesora hizo referencia a la ausencia de David.

20/10/10

¿ DÓNDE TE ENCUENTRAS DAVID ?

Es la pregunta que flota en nuestra Escuela, es la pregunta que deambula por los patios y que no tiene respuesta en el banco de tu sala.
¿ Por qué te has ido David y te enfadas con nostros cuando te buscamos ?
Es la pregunta que ha surgido de tus compañeros y de todos nosotros.
¿ Dónde te fuiste David ?
Tal vez bastaría un signo, una pequeña señal para mitigar esta enorme tristeza.
Pero nada sabemos de tí y todos acá te estamos extrañando.
Te apareces en nuestros juegos, te apareces en el aula cuando se produce el silencio y en la calle y en tu casa, donde nadie jamás dejará de recordarte cada día.
Seguramente la morada del camposanto, donde reposa tu cuerpo tierno estará siempre protegida. Habrá mariposas y palomas, aves silvestres que siempre trinan cada mañana recordándote que ha amanecido.
Habrá gentes anónimas que se acercan a darte un saludo y un mensaje para que lo lleves al lugar donde habitas hoy. Siempre habrá mariposas del campo que revuelan sobre tí, porque las mariposas tienen especial afecto por los niños como tú y les visitan en todas las estaciones, en inviernos y veranos.
Pero. ¿ Dónde te has ido?
¿ Qué puerta golpearemos para que seas tú el que sales a abrir ?

Alguien me ha dicho hace unos días que Dios quería tenerte junto a él. De eso no hay duda.
Dios posee los ejércitos celestiales . son una multitud incontable de ángeles, arcángeles, serafines y coros que día a día alaban y bendicen al autor y Señor de la vida.
Esa es parte de  su misión en la inmensidad y en la armonía de la creación.
Y ¿ Quiénes constituyen estos ejércitos ?
Son los niños como tú.
Aquellos rostros puros y tiernos que irrumpieron su corta existencia con lo abrupto de la muerte.
Los ejércitos celestiales están formados por los niños como David. Hermosos con un dejo de soledad, niños que provocan la más inmensa tristeza y desolación entre nosotros, pero que en el cielo, en la dimensión celestial son recibidos con flautas, trompetas liras y cantos, porque cada uno de ellos conforma la eternidad de Dios.

Alguien me dijo que tal vez se encuentre hoy frente a una de las Unidades de esos ejércitos, porque Yahvé Sebaot, que es Dios, ha constituído sus miríadas con todos aquellos niños que murieron en el seno de su madre, con todos los niños que murieron en los brazos de su madre. Con todos aquellos niños púberes que nunca dejaron un consuelo a sus padres y a su familia.
Hoy son los hermosos e intangibles ángeles que desarrollaron su luminosidad en otra dimensión en otros planos inaccesibles.
Y los soldados como tú David, son los que van en la primera línea y que nos visitan de vez en cuando, justamente cuando nosotros somos como niños y podemos ver con los ojos de un niño.
Tu cuerpo, descansará en paz.
Pero...¿ Cómo un nño con toda esa energía puede descansar ?
Pues, alguien me ha dicho que los soldados celestiales y los ángeles nunca tienen reposo.
No duerme ni reposa el guardián que desde hace unos días tenemos en el cielo.
Pero está junto a nosotros.


UNA ALDEA FAMILIAR

La comuna de Quilicura, en el año 1960, no tenía más allá de treinta y cinco mil habitantes, por lo tanto era una pequeña y familiar aldea.
   Calle O'Higgins ( Hoy centro comercial Santa Isabel )

Era muy normal que los vecinos se saludaran compartieran sus problemas, sus tristezas, sus alegrías, sus anhelos.
Era una aldea familiar donde los niños podían recorrer sus callejas sin inconvenientes, cada vecino sabía a que familia correspondía cada infante, cada joven.
Era un espacio terreno sin secretos, sin violencias, sin grandes egoísmos.
Por otra parte , la mayoría de la familias eran oriundos de este pueblo, sus abuelos nacieron acá. Una generación sucedía a la otra, por lo que los apellidos eran propiedad de todos.
Lo novedoso del vecindario era la llegada de un extranjero, alguien que irrumpía con su propia cultura lo que los Quilicuranos habían construído.
En efecto, algunos apellidos se hicieron ilustres y formaron parte de la historia secreta de sus habitantes : los Mangiamarchi. los Cooper, los Anzieta los Sarmiento y otros.

Precisamente, esto es lo que variaría incipientemente en un principio, de una forma muy sutil, pero luego de los años 80 y 90 sería con mucha intensidad.
Jaime Silber Merener , no fue quilicurano, ni siquiera había nacido en nuestro país, pero se integró a nuestra historia al contraer matrimonio con Carmen Romo Sepúlveda, hija de una de las familias más antiguas de Quilicura, cuna de políticos y servidores públicos , quien además fue Alcaldesa de Quilicura por un largo período.
A través de los aspectos de su vida, se reconstruye otra parte de la historia de nuestra gente y de nuestro pueblo.
Con estas referencias expresadas antes de su funeral , una inmensa cantidad de vecinos conoció la inserción de otros apellidos a la sociedad local.
En el salón de artes del centro cultural, en el corazón de nuestro antiguo sector pueblo, ante Senadores, Diputados, Alcaldes, Autoridades Comunales, Dirigentes, familiares y vecinos fueron despedidos sus restos.

14/10/10

JAIME SILBER MERENER

Terminaba la década de los años sesenta con ese incesante aire de renovaciones, con esa inmensa turbulencia , social, económica y cultural, con la diversidad de transformaciones en todos los ámbitos y con la nueva composición que irrumpía el rostro del planeta.
Fue precisamente a fines de esta década, que Jaime Silber llegaba a nuestro país.
Chile, como todos los pueblos latinoamericanos, vivía esa creciente efervecencia y todos nosotros transitábamos , entonces, por la historia.
Al término de la misma década , en Quilicura se fundaba la Escuela número 386, María Ruiz Tagle de frei, enclavada en el corazón de la población que allí nacía.
Es  necesario volver la mirada hacia atrás, para entender como se desencadena esta breve historia y como a través del amor se unen las tradiciones, las culturas y los pueblos.
Jaime León Silber Merener, pertenecía a una familia judía. Los Judíos son un pueblo de profundas tradiciones, de fe y de familias muy numerosas.
Del matrimonio de Moisés Silber y de Cecilia Merener nacieron nueve hijos:
Abraham, Juana, María, Fanny, Luisa, Antonio, Jaime, Manuel y Rosa.
Jaime nació el primero de agosto del año mil novecientos veiticuatro, es decir cumpliría 83 años. Su infancia transcurrió en la  República Argentina , en Santa Fe, en el barrio de Guadalupe.
La familia tenía una pequeña parcela donde él y sus hermanos jugaron y crecieron. Desde pequeño fue el comañero y el conciliador de sus hermanos y allí en la intimidad de su hogar se forjó el carácter sensible, sereno y pasivo que todos le conocimos, desde allí surgió el amor por la música, por la literatura, por la artesanía y las artes en general.
De su infancia y presagiando lo que ocurriría, Manuel escribe uno de estos días estas breves líneas a su hermana Rosa :
"Querida hermana...
Fue un gran hermano para mi, a quien siempre tuve como ejemplo.
Por qué no decirlo?
Nosotros los Silber somos tan mezquinos en demostraciones.
Admiraba su sentido común , su pensamiento, su cultura.
Será  por eso tal vez que cuando chicos nos peleábamos tanto por los celos, tal vez que yo tenía por su prolijidad y concentración en todo lo que hacía.
Y su inteligencia que siempre sobresalió sin quererlo. En fin, fue un gran tipo. Yo lo recordaré siempre , como lo hago con nuestros padres y con todos mis hermanos, ya que entiendo que soy la resultante un poco de cada uno de nuestro clan.
Quisiera le trasmitas sobre todo a Carmen y Gabriel mis sentimientos y a toda la familia de Carmen, que lo atendieron y lo quisieron como nosotros.
Reciban todos ustedes un gran abrazo.
Tu hermano
Manuel "
En su juventud crecieron en él los valores de la solidaridad y el respeto, alumno ejemplar, identificado con las ideas progresistas y con los movimientos de izquierda de aquellos años, se integró al club de jovenes israelitas y se tituló de constructor civil.
A fines de los años sesenta, buscando horizontes nuevos y por el atractivo de nuestro país llega a casa de María, su hermana en Chile.
Jaime vivió esta época de su vida en el sector de San Borja e instala una mueblería en la calle Arturo Prat. En el año 1968, ingresa al Instituto Chileno Búlgaro, que es el eslabón que lo conecta, sin saberlo aún, con su esposa y con la Comuna de Quilicura.

En Quilicura, la Directora de la Escuela 386, es la señora Carmen Romo Sepúlveda, quien junto a  sus profesores establece un estrecho vínculo con el Instituto Chileno Búlgaro y con la embajada de la República Popular de Bulgaria.
En el año 1970, la escuela de la población María Ruiz Tagle, se denomina "República popular de Bulgaria". Son los años en que florece la amistad con los pueblos socialistas y es allí donde Jaime Silber estrecha lazos con nuestro pueblo, con sus profesores, con los niños y con la comunidad.
Son los años en que un ferviente ánimo de participación popular estremecen a nuestro país y florece por doquier el arte, la música y la cultura.
Era un hombre extremadamente simpático, locuaz, de una cultura impresionante que lograba cautivar con la simpleza de los hombres sabios.
Otros derroteros de la vida,el estudio, el amor filial, le hicieron dilatar su vida afectiva y sentimental. La unión matrimonial definitivamente nunca fue su prioridad.
Sin embargo encontró el amor de su vida en esta tierra, y el 16 de octubre del año 1975, contrajo matrimonio con quien le acompañaría hasta esta instancia, hasta el día de hoy. Pronto cumplirían 32 años. Fue fundamental no sólo para su esposa, sino para toda la familia, constituyendo una fortaleza en el hogar, respetando todo lo que esta nueva forma de vivir le significaba, creando una familia compacta sólida y admirable.
Su plenitud en la vida llegó con el regalo que Dios le tenía preparado, y el día 15 de septiembre del año 1976, nace su primogénito y adorado hijo Gabriel.
Siempre le vimos contento, asumiendo absolutamente que el rol protagónico en la actividad pública correspondía a su esposa. Parecía un hombre tímido, pero era el don de la prudenciaque le hacía comportarse con esa clase reservada sólo para los hmbres que han descubierto que la vida es un caminar plácido y sereno, que se puede conservar la paz del alma en la bulliciosa confusión de la vida
Era capaz de reir y llorar y así nosotros le vimos, podía cantar un tango con pasión y sin embargo nada disminuía su magnetismo y su valor.
El disfrutó de la vida en nuestro país, se insertó en la vida chilena, le gustaba el clima y se deleitaba con la diversidad de paisajes que tiene nuestro territorio.
Hace más de un año, su salud se fue deteriorando en forma continua e irremediable.
La noticia de su deceso se esparció rápidamente por toda la comuna : a las 21.30 horas del día 28 de julio, el esposo de la señora Alcaldesa había cerrado sus ojos para siempre.
Gracias Jaime Silber por haberte conocido.
Mi anciana madre desde su lecho de enferma , te envía un abrazo.

4/10/10

OTRO DIA SE VA.

                                             Calle Matta frente al fundo "Chacarilla"
 
Un paisaje de penumbras cubre la comuna de las tres piedras, su alumbrado es casi imperceptible a la distancia. Viejos postes del alumbrado público encienden sus luminarias al anochecer, a lo lejos el ruido de animales y sus mugidos y relinchos en las horas postreras del día.
En el aire el perfume de la hierba y de los aromos y las flores.
De vez en cuando un motor, un viejo automóvil o un camión que avanza por la única calle central de la comuna, ladridos de perros y la música del silencio.
A esa hora, en el crepúsculo, los niños de entonces, con ansiedad ven que el día termina y se acaban sus juegos y también sus labores del campo.
Será el cielo limpio y estrellado, el fulgor de la luna lo que permitirá que sus juegos inocentes se prolonguen al menos por unos minutos más sobre la tierra fresca.
A esa misma hora miles de zancudos se dejan caer sobre el pueblo y son repelidos por el humo de la bosta de los animales.
Sin embargo los niños y niñas son inmunes al ataque de los insectos.
Una de esas niñas es Carmencita.
En su vida realizó este tránsito que vivió Quilicura y sus ojos de niña miraron ese paisaje.
En octubre del año 2007, fallece Carmen  Muñoz Clavero.
Fue despedida por sus amigos y compañeros con un brindis de cerveza como ella lo había solicitado. Una mezcla de lágrimas y risas contagió a los asistentes.