26/10/10

LAS CAMPANADAS DE LA FE

La comuna tenía tres vertientes definidas de participación vecinal, años cincuenta y sesenta, eran estas tres entidades las que congregaban a los Quilicuranos en situaciones muy específicas.
Por una parte estaba el fútbol, con todo el desborde de niños y jóvenes, especialmente los fines de semana.
Como había varios campos deportivos durante la mañana jugaban fútbol los niños o "infantiles" y por la tarde los equipos adultos.
La iglesia Evangélica, era un sonido inconfundible en las tardes de los días domingos.
Una larga y ordenada fila de instrumentistas y cantores elevaban  himnos y cánticos a Dios y desde lejos se podía escuchar el eco de las voces, de las guitarras , del acordeón y las trompetas.

Por otra parte, la presencia de la iglesia Católica.
En la esquina de las calles Matta y  O'higgins, se alzaba la capilla se adobes, la única que tenía el pueblo.
En el mes de noviembre se rezaba "el mes de María" y muchos feligreses acudían al pequeño templo, la mayoría eran mujeres de avanzada edad y muy devotas, asiduas del misa y del rezo del rosario.

Al presente, es posible que las campanadas de la iglesia no se escuchen, pero en el año 1954, si que se escuchaban.
El silencio del campo y de nuestro entorno, nos permitía escuchar las campanadas de la Iglesia que llamaban a la misa del día domingo, a la misa de la siete en los días de la semana o el trepicar en la despedida de un difunto.
Las campanadas de la Iglesia resonaban en el pueblo y los católicos acudían a su llamada.

La señora Dalila Galleguillos era una de las vecinas más antiguas y vivía en la calle Guardia Marina Riquelme, sector central de la comuna, reconocida y activa integrante de la Iglesia católica de Quilicura quien acudía diariamente a la parroquia.
Contrajo matrimonio con Fernando Contreras, con quien tuvo cuatro hijos.
Ella falleció en septiembre del año 2006 y fue acompañada por muchos feligreses.
Las campanadas de ese día no se dejaron escuchar. Un ambiente de jolgorio, de cuecas y tonadas anunciaba las festividades de la independencia.
Este poema fue leído en su funeral , luego de la Eucaristía que se celebró a media tarde en el bullicio del mes de septiembre...

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